En España, el IRPF es un impuesto progresivo que se descuenta directamente de la nómina de los trabajadores y cuya retención varía según tu situación económica y personal. Muchas personas descubren al revisar sus nóminas que el porcentaje de retención aplicado puede ser mayor o menor de lo que les corresponde realmente, lo que puede generar dudas sobre si les están reteniendo demasiado y cómo verificarlo o regularizarlo.
¿Por qué varía la retención de IRPF en tu nómina?
El porcentaje de retención de IRPF no es fijo, sino que depende de una serie de factores que Hacienda y tu empresa tienen en cuenta. Los principales elementos que influyen en el cálculo son:
- Sueldo bruto anual: Es la principal base sobre la que se calcula la cuantía a retener.
- Situación personal y familiar: Tu estado civil, si tienes hijos o personas a tu cargo (mayores, con discapacidad, etc.) afecta directamente al porcentaje. Una mayor carga familiar suele reducir la retención.
- Número de pagas y tipo de contrato: Si tu salario se reparte en 12 o 14 pagas, la retención mensual se adapta a esa distribución, al igual que si tu contrato es indefinido o temporal.
- Residencia fiscal: Existen particularidades autonómicas, por ejemplo en el País Vasco o Navarra, donde se aplican normativas forales propias sobre el IRPF.
Tu empresa está obligada a actualizar estos datos cada año (o cuando ocurra un cambio en tu situación, como el nacimiento de un hijo o un matrimonio) mediante el Modelo 145, que recoge toda la información relevante sobre tu situación familiar y personal para calcular correctamente la retención. Si no informas a la empresa sobre cambios, podrían aplicarte un porcentaje incorrecto.
Tramos y porcentaje de IRPF aplicables en 2025
Para saber si te están reteniendo demasiado, es útil conocer los tramos oficiales de IRPF previstos en los Presupuestos Generales del Estado para 2025. Estos tramos conforman una escala progresiva, lo que significa que a mayor base imponible, mayor tipo impositivo se aplica:
- Hasta 12.450 €: 19%
- De 12.450 € a 20.200 €: 24%
- De 20.200 € a 35.200 €: 30%
- De 35.200 € a 60.000 €: 37%
- De 60.000 € a 300.000 €: 45%
- Más de 300.000 €: 47%
No obstante, estos porcentajes se aplican de forma progresiva a cada tramo, no a la totalidad de tu renta, y sobre la base imponible después de aplicar las reducciones y deducciones legalmente previstas. Por ejemplo, un trabajador casado, con un hijo y un salario anual de 30.000 € podría tener una retención aproximada entre el 14% y el 16% tras aplicar todas sus circunstancias personales.
Cómo saber si te están reteniendo más IRPF del necesario
La clave para determinar si te están reteniendo demasiado es comparar tu retención real con la que te corresponde según tus circunstancias. Existen varias herramientas online gratuitas que puedes utilizar para calcular el porcentaje correcto:
- Calculadora IRPF 2025 de entidades bancarias y plataformas especializadas: Solo necesitas introducir tu sueldo bruto, edad, número de pagas y situación familiar para recibir un resultado aproximado del porcentaje de retención que te corresponde.
- Simuladores oficiales de la Agencia Tributaria: Recogen tus datos personales, familiares y económicos para estimar la retención adecuada y, si procede, ajustarla. Es fiable y ampliamente recomendado.
Si tras el cálculo ves una diferencia importante entre tu porcentaje real y el estimado (teniendo en cuenta tramos y circunstancias personales), puedes solicitar a tu empresa que revise y ajuste la retención. Es tu derecho que la retención se adapte a tu verdadera situación familiar y económica actual.
Qué hacer si detectas un exceso de retención y cómo ajustarlo
Si compruebas que tu empresa te está aplicando una retención superior a la que correspondería en función de tus circunstancias, puedes actuar para evitar esos anticipos excesivos. Los pasos a seguir son:
- Revisa los datos presentados con el Modelo 145 y actualízalo si corresponde.
- Entrega el modelo actualizado a tu empresa y solicita el ajuste de la retención lo antes posible.
- Habla con recursos humanos o quien gestione las nóminas en tu empresa para que realicen el cálculo correcto y adapten la retención desde la siguiente nómina.
Si detectas el error a mitad de año o incluso después, la empresa puede ajustar la retención para los meses restantes, compensando el exceso retenido en las nóminas posteriores. No obstante, si esto no ocurre, podrás regularizarlo al hacer tu Declaración de la Renta (el exceso retenido se te devolverá si procede).
Por otro lado, si la retención ha sido inferior y, tras ajustar los datos, resulta que deberías haber pagado más, tendrás que ingresar la diferencia al realizar la declaración, por eso es conveniente revisar y actualizar los datos cada año para evitar sustos a posteriori.
Factores que suelen considerarse incorrectamente
- No informar de nuevas cargas familiares, como un hijo recién nacido.
- No actualizar el estado civil tras un matrimonio o separación.
- No indicar condiciones de discapacidad propias o de familiares a cargo, que pueden rebajar la retención considerablemente.
El uso de simuladores oficiales es la forma más rápida y fiable de corregir estos errores. Además, cualquier modificación debe comunicarse por escrito a la empresa, dejando constancia del cambio.
Consejos finales y recursos útiles
Realizar una revisión anual de tu retención de IRPF ayuda a:
- Evitar anticipos excesivos de impuestos que afecten a tu liquidez mes a mes.
- Prevenir regularizaciones desfavorables en la declaración anual.
- Aprovechar todas las deducciones y beneficios fiscales aplicables según tu situación personal.
Recuerda que, ante cualquier duda, puedes consultar herramientas como la web de la Agencia Tributaria, calculadoras de bancos reconocidos y asesorarte con un experto fiscal para situaciones complejas o especiales.
Mantener tus datos correctamente actualizados es esencial para no pagar de más ni de menos en la nómina. Con un simple cálculo personalizado, puedes asegurarte de que el porcentaje de IRPF que se aplica a tu salario sea realmente el que te corresponde.